En conferencia de prensa, Paz instó a «no ser mezquinos con nuestra democracia» y dijo que había hablado con el presidente saliente, Luis Arce, para coordinar el traspaso de poder.
21 de octubre de 2025 El presidente electo de boliviaderechista Rodrigo Paz, llamado este lunes todas las fuerzas políticas del país. trabajar juntos para garantizar gestióncomo anunciamos restablecimiento de relaciones diplomáticas con Estados Unidos y abriendo una nueva etapa de diálogo con Chile. «No podemos ser mezquinos con nuestra democracia»Paz hizo el anuncio en su primera conferencia de prensa tras ganar la segunda vuelta de las elecciones.
Acompañado de su vicepresidente, Edmundo Lara, Paz enfatizó que El mandato del pueblo «no es conflicto ni violencia callejera»y lanzó una invitación explícita a su rival en la segunda vuelta, el expresidente Jorge “Tuto” Quiroga, para sumarse al proceso de transición. «La grandeza lleva al no enfrentamiento», afirmó el presidente electo desde La Paz.
El líder del Partido Demócrata Cristiano (PDC) conversó este lunes con el presidente saliente Luis ArcePaz, economista de 58 años e hijo del expresidente Jaime Paz Zamora, ganó el domingo una inédita segunda vuelta presidencial con el 54,61 por ciento de los votos frente al 45,39 por ciento de los sufragios, según un recuento preliminar del Tribunal Supremo E Quiroga. El resultado marca el fin de un ciclo político de casi dos décadas de hegemonía del Movimiento Al Socialismo (MAS), iniciado en 2006 con Evo Morales.
«Capitalismo para todos»
Paz anunció que su futuro gobierno implementará un «nuevo modelo económico» basado en descentralización de los recursos fiscales. La propuesta pide volver a distribuir los fondos públicos de forma justa, reduciendo el actual esquema de concentración presupuestaria. «El gobierno central se queda con el 80 por ciento de los recursos, y sólo el 20 por ciento va a los 339 municipios, gobernaciones y entidades descentralizadas. Es una nimiedad. Proponemos un reparto 50/50», explicó.
El plan económico incluye la liberalización de las exportaciones, la reforma del sistema fiscal y la creación de líneas de crédito a bajo interés para el sector manufacturero. Paz también esperaba que su administración promoviera un modelo de «capitalismo para todos», con recortes de impuestos y fuertes recortes de aranceles para alentar la inversión.
Bolivia atraviesa una importante crisis económica, marcada por la falta de dólares, escasez de combustible y una inflación acumulada del 16,92 por ciento mensual. Ante este escenario, Paz informó que buscaría apoyo externo para estabilizar la moneda y ya inició contactos con «países amigos» como Estados Unidos, Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay para garantizar el suministro de hidrocarburos cuando asuma el mando.
De regreso a Washington
En materia diplomática, Paz confirmó que Bolivia restablecerá las relaciones con Estados Unidos, cortadas desde 2008 tras la expulsión del embajador Philip Goldberg El expresidente Evo Morales. «Esa relación continuará», afirmó el presidente electo, quien afirmó haber conversado con funcionarios del Departamento de Estado, cuyo secretario Marco Rubio felicitó al nuevo presidente y dijo que su elección «representa una oportunidad transformadora para ambas naciones».
Paz también anunció que revisará los acuerdos firmados por el gobierno de Arca con Rusia y China en torno a proyectos mineros de litio, con el objetivo de «transparentar todos los contratos y asegurar que beneficien al país». En cuanto a Chile, con el que Bolivia no mantiene relaciones diplomáticas a nivel de embajadores desde 1978, el nuevo presidente afirmó que buscaría abrir una fase de diálogo «en beneficio de ambas naciones».