El noruego Casper Ruud, actualmente ubicado como el Número 15 del mundo en el ranking de la ATP, se coronó campeón del prestigioso torneo ATP en Madrid este domingo. Este triunfo marca un hito significativo en su carrera, ya que se trata de su primer título en un Masters de 1000. En una final repleta de emoción, Ruud se enfrentó al talentoso británico Jack Draper (n. 6), a quien logró vencer con un marcador de 7-5, 3-6 y 6-4 después de un intenso partido que duró 2 horas y 29 minutos.
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El escandinavo, que tiene 26 años, ha sabido consolidarse como el eterno segundo en las citas más importantes. Su reciente victoria confirma su notable forma en la superficie de tierra batida, la cual es su favorita, a solo tres semanas de que comience Roland Garros, uno de los torneos más importantes del mundo del tenis.
Además, con este triunfo, Ruud volverá a ocupar un lugar entre los diez mejores del ranking de la ATP el próximo lunes, alcanzando la séptima posición. Este logro es particularmente significativo dado que ha estado en una búsqueda constante por alcanzar la cúspide del tenis, especialmente después de haber perdido tres finales de Grand Slam, así como dos Finales de Masters de 1000 en el pasado. Su triunfo en Madrid no solo enriquece su palmarés, sino que representa una redención personal y un impulso hacia sus futuras competiciones.
Durante el emocionante pulso decisivo en la capital española, Draper tenía un 5-4 y un servicio a favor para cerrar el primer set, situación que parecía favorecerlo. Sin embargo, Ruud demostró una admirable capacidad de reacción, al ganar tres juegos seguidos para asegurar el primer set. Esta recuperación fue crucial y sentó las bases para su triunfo final en el encuentro.
El segundo set vio a ambos tenistas empezar de manera equilibrada, llegando a un empate de 3-3. Fue en este punto cuando el británico comenzó a tomar el control, logrando despegarse de Ruud y finalizando el set con un claro 6-3, casi sin ofrecer resistencia, lo que llevó el partido a un tercer y decisivo set.
En el último set, que resultó ser el más determinante de la contienda, Ruud logró romper el servicio de Draper en el quinto juego. Este quiebre le permitió tomar una ventaja en el marcador que supo mantener, finalizando el partido con un 6-4. La energía y la determinación que mostró durante este set clave evidenciaron su voluntad de ganar y su capacidad para sobreponerse a la adversidad.
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